Historia de las semillas: Northern Lights

Conocida por la falta de rivales que tiene su gran y único sabor, la Northern Lights ganó su imperecedera popularidad cuando fue introducida en Europa desde su hogar en el Noroeste de Estados Unidos. Desde su aparición, y con permiso de la Skunk #1, otras variedades difícilmente han conseguido el clamor que esta variedad alcanzó en su viaje desde la impopularidad hasta su estatus de fama mundial.

Bienvenidos al segundo punto de nuestra saga «Historia de las semillas» en la que relataremos el nacimiento y mitificación de una de las variedades más queridas y aplaudidas en todo el mundo cannábico: la Northern Lights.

Sólo la legendaria G-13 es capaz de rivalizar con el ritmo frenético con el que la Northern Lights alcanzó tan poderoso reconocimiento. Al principio, nos encontrábamos un planta puramente indica pero posteriormente se fueron desarrollando híbridos que al introducir esencias sativas en el pedigrí de la planta, se le pudieron añadir toques afrutados a su sabor. Hoy en día, las tendencias de consumo han llevado a la Northern Lights a regresar a su origen indico aunque conservando mínimamente los toques sativos como un vestigio del recorrido que ha hecho su genético a lo largo de su existencia.

Northern Lights: historia

Completando un largo trayecto desde el noroeste del Océano Pacífico hasta Holanda en el año 1985, esta hermosa variedad llegó en posesión de Neville Schoenmaker, quien fuera propietario de la primera compañía de semillas holandesa conocida como The Seed Bank que posteriormente reformó su denominación a Sensi Seeds bajo un nuevo propietario.

The Indian

Todos los indicios apuntan a un cultivador conocido como «The Indian» fue el que dio nacimiento a esta variedad de marihuana en una isla cercana a Seattle (Washington). Aparentemente, The Indian concibió 11 variedades de Northern Lights en las cuales la #5 era la mejor, seguida de la #1 y se describe a la original como una plantación verdaderamente de Afgana con características indicas extremas: eran de un color verde muy oscuro y estable con un alto ratio de flores y hojas que le aportan a la planta un toque de pino con tonos púrpuras durante la floración a la vez que destaca por ser una de las variedades más resinosas con porcentajes de THC en torno al 15% e incluso muy por encima.

Un ejemplar de marihuana afgana.

Schoenmaker

Se dice que Schoenmaker obtuvo de The Indian distintas variedades de Northern Lights pero que eran todas clones hembras. Poco después, en The Seed Bank aparecieron nuevas plantas en las que se incluían nuevas cepas de Northern Lights.

Esto supuso un poco de desconcierto ya que al sólo tener hembras, no tenía cómo obtener nuevas semillas por lo que se especula que el trato con The Indian se mantuvo latente pero en las sombras, no olvidemos que nos encontramos en los peores años en cuanto a la persecución de los sembradores en USA, aunque lo más probable es que haya optado por mezclar dichas hembras con otras variedades que él ya poseía por lo que la genética original de las Northern Lights se podría dar por perdida en nuestros días aunque con seguridad se trata de una mezcla de hierba Afgana con Thai Sativa sólo que no se sabe en qué punto se fueron introduciendo a la genética.

Ejemplares clave

Independientemente de su origen o manipulación genética, se etiquetaron a dos machos particulares como Northern Lights #1 y #2 siendo definidos como los padres de muchas nuevas plantas en uno de los catálogos de Seed Bank en los 80`s. De hecho, la Northern Lights #2 (cuya genética es una Northern Lights #1 mezclada con Kush híbrida hindú) se sigue vendiendo en la actualidad bajo el nombre de Oasis a la vez que forma parte de la genética de la Aurora B de The Flying Dutchmen.

La Aurora Indica Strain #7, una extraña descendiente de la Aurora B.

Estos dos machos también dieron lugar a nuevas variedades que surgieron posteriormente y de gran fama: la potente G-13, la Big Bud, la poderosa Skunk #1, la Hash Plant, Haze e incluso la Swazi entre otras son algunas de las variedades que surgieron de la Northern Lights #1 y #2.

Aunque volviendo a esa época del «pelotazo» se le debe reconocer como la más destacable unión la que se llevó a cabo la mezcla Northern Lights #5 con Northern Lights #2 que lamentablemente no existe ya en nuestros días.

Cabe mencionar que de todas las variables mencionadas aquí, la única que aún se puede conseguir prácticamente con la misma genética de esos años es la Hash Plant de Sensi Seeds cuya composición la conforma un cuarto de Northern Lights #1, o la Big Bud aunque cada vez menos similar a las de esos años.

La Hash Plant de Sensi Seeds, una de las semillas top ventas actualmente.

Northern Lights: linaje

El linaje genético de las distintas variedades de Northern Lights rápidamente se volvió algo extremadamente confuso dado que todas las variedades están profundamente relacionadas y mezcladas entre ellas. No obstante, la versión #5 clonada, considerada la planta superior de todas las Northern Lights, aparentemente nunca fue vendida en semillas y por lo tanto es la única versión inalterada de las originales. De hecho la Northern Lights #5 Afgana pura ha sido utilizada para crear asombrosos y potentes híbridos en combinación con otras cepas que The Bank Seed poseía en esos años, muchas de las cuales ganaron la Cannabis Cup pero se encuentran extintas a día de hoy.

La belleza del galardón que otorga el High Times Cannabis Cup es difícil de igualar.

Muchas de estas variedades, por otro lado, llegaron a las manos de otras compañías como la Super Sativa Seeds Company que las vendía con otros nombres, lo cual ha dado aún más pie para que perder las referencias exactas de los linajes. De esta situación podemos extraer uno de los ejemplos más icónicos de la misma: la famosa M39. Esta famosa variedad fue top ventas en algunas regiones pero lo que no se supo, hasta mucho tiempo después, es que su composición genética la constituían la rara Basic 5 junto con Skunk#1. ¿Y qué tiene que ver esto con el resto del artículo? Muy simple, hay indicios claros de la Basic 5 realmente era Northern Lights #5 extraída de The Seed Bank.

La herencia de Sensi Seeds

Sensi Seeds, quizás, el banco más importante de semillas en el mundo cannábico.

Actualmente, Sensi Seeds (la antigua The Bank Seed) ofrece algunas versiones no numeradas de Northern Lights aunque las describe como una mezcla de 3 variantes puras de dicha cepa que tenían a su disposición en el pasado. Tras décadas de selección y reinserción de variedades puras en el híbrido general, es difícil poder especificar un linaje exacto en cada una de las variables aunque lo más probable es que todas las semillas de Northern Lights que vende este banco sean resultado de innumerables mezclas de las versiones #1, #2 y #5. Ejemplo de ello es la híbrida poderosa Northern Lights #5 mezclada con Haze Regular para un efecto mayormente psicoactivo.

Northern Lights: legado mundial

En los 80`s, la Northern Lights dio lugar muchas variedades que destacaron por méritos propios y que palidecieron en cuanto a popularidad sólo cuando aparecieron mejores cepas o porque se extinguieron. El descontrol que hubo para clasificar y separar semillas originales de las mezcladas ha llevado a la confusión y pérdida total de la posibilidad para realizar un seguimiento al linaje genético de la misma.

Es por ello que las cepas que contienen Northern Lights, en la actualidad, son demasiadas como para mencionarlas una por una, a la vez que muchas de ellas pueden no contenerla realmente y se piense que sí debido al mencionado descontrol.

Esta misma ambigüedad la ha convertido en una de las líneas genéticas de cannabis más importantes siendo ofrecida por muchas compañías que ofrecen sus propias versiones. Algunas siendo más cercanas a sus orígenes índicos mientras que otras apuestan por una genética más sativa existiendo, por tanto, muchísimas versiones distintas en cada banco de semillas aunque todas con un factor común: que los cultivadores ofrecen una información muy escueta, inexacta y carente de detalles en cuanto al linaje genético que precede sus semillas, ya sea por falta de control del mismo o simplemente por no querer.

Un ejemplar de Shiva Skunk, resultado de mezclar la Northern Lights #5 con Skunk #1.

Cabe mencionar que hay una cepa conocida como la P91 que se cultiva en privado, estando fuera del mercado, y que se originó en San Diego que se cree es una de las últimas cepas 100% puras de Northern Lights #5 aunque comprobarlo es imposible dado el anonimato y falta de información de sus cultivadores y su cultivo.

Northern Lights: características.

Como hemos dicho, esta variedad destaca profundamente por tener un producción de resina tremendamente destacable lo cual da lugar a cogollos sumamente compactos a la vez que muy numerosos, por lo que esta planta es sinónimo de alta producción. Las ramas de la planta tienen un crecimiento predominantemente lateral y con alta resistencia, lo cual les permite soportar el peso de sus contundentes cogollos.

Otro de los elementos determinantes de la Northern Lights es que su floración se produce en menos de 2 meses y tiene una alta sujeción al moho debido a su portentosa densidad floral lo cual la convierte en una de las mejores cepas para la producción de hachís de calidad alta.

Bola de hachís lista para el consumo.

En cuanto a los efectos que aporta al momento de consumo, dependerán obviamente de la genética de la planta, pero podemos destacar un olor y sabor discretos y suaves, totalmente alejados de la rudeza de las indicas afganas que le dieron lugar en su lejano origen. Resuena su característico olor similar a la madera de un pino joven con un leve sabor a miel (según la variedad). Otra característica muy comentada es una ligera terrosidad.

El uso recomendado de esta planta es el de nocturnidad para poder descansar más rápidamente y de manera profunda aportando una relajación física muy por encima de otras cepas.

 

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